viernes, 1 de noviembre de 2013

¿APRENDEREMOS DE ESTA CRISIS?

 Ahora que algunos indicadores y síntomas nos indican que es posible que estemos saliendo de la crisis, es el momento de reflexionar y hacernos preguntas sobre lo sucedido.
 La primera que yo me hago es si esta crisis ha servido para algo. Me voy a explicar, la palabra crisis tiene su origen en el griego y significa "separar" o "decidir" y curiosamente hay otras dos palabras que tienen su mismo origen, "crítica" (análisis previo al juicio) y "criterio" (razonamiento). Pues bien, para que la crisis sirva para algo bueno tenemos que tener la capacidad de separar lo bueno de lo malo que teníamos antes de sufrirla y decidir el nuevo camino a seguir. Para hacer eso tenemos que tener una gran capacidad de auto crítica y el suficiente criterio para razonar hacia donde queremos ir en el futuro de nuestra sociedad.
 Esto que a simple vista parecería fácil de decir, me temo, que es lo mas difícil de hacer.
 Yo, por mi profesión bancaria, recibo a diario la pregunta de "cuando vamos a salir de la crisis" y mi respuesta habitual es "nunca". Existe un problema que no es achacable a la gente de común y es debido a que nuestros responsables políticos y económicos no quieren que la gente sepa que nunca mas vamos a vivir como antes, es mas, seria dramático volver a vivir así, porque estaríamos abocados a una crisis de peores consecuencias que la que estamos sufriendo en estos momentos.
 La gente, parece que quiere que termine la crisis para volver a comprarse un coche con la hipoteca de la casa, volver a irse a Cancún una semana, pagándolo en 6 meses, etc.
 Desgraciadamente, no estamos separando lo malo de nuestro comportamiento, ni estableciendo nuevos valores sociales que nos eviten caer en la misma trampa de nuevo.
 La nueva aristocracia, la casta política y económica que nos gobierna, no tiene ninguna intención de cambiar el estatus quo actual, y es lógico. Somos los ciudadanos con una cierta conciencia social los que tenemos que impulsar los cambios necesarios, imprescindibles, para afrontar el futuro nuestro y de nuestros hijos. Tenemos que enterrar esta sociedad podrida y en descomposición y dar vida a una nueva sociedad con unos nuevos valores.
 Para conseguir esto, lo primero que tenemos que saber que son necesarias varias generaciones, pero que si no empezamos ya, antes de salir de la crisis, no lo haremos nunca. La crisis ha puesto en evidencia y ha derribado todos los pilares sacrosantos de esta sociedad actual, basada en el consumo de bienes y servicios innecesarios, en la creencia de un crecimiento económico indefinido, en el incremento de los beneficios empresariales, a costa de lo que sea, sobretodo explotando a los trabajadores, a los que solo se consideran sujetos consumidores, sin capacidad de pensar y a los que se lleva a votar cada cierto tiempo, para dar apariencia de legitimidad al "sistema".
 Hay que reformar, potenciar y valorar el sistema educativo. Ese es el principio de todo.
 Tenemos que educar a las futuras generaciones y dotarlas de los instrumentos necesarios para que ejerzan de "ciudadanos libres". Para ello es imprescindible una educación libre de adoctrinamientos sociales, políticos o religiosos. Porque la educación no es un fin, es un medio, el mas importante para conseguir personas conscientes, formadas y libres. Este es el fin, la PERSONA, con mayúsculas.
 A los poderosos les interesa poder manipular, infundir miedo. Sobretodo miedo a perder lo poco que se tiene. Por eso nos dan la posibilidad de adquirir "cosas", para que tengamos miedo a perderlas.
 Cuando una sola generación consiga ser dueño de su propio futuro, sea libre de las ataduras impuestas por estos esclavistas, manipuladores, nunca mas podrán conseguir que vuelvan a ser esclavos de nada ni de nadie y habrá nacido una nueva sociedad, mas justa, mas igualitaria, mas libre, en definitiva mas feliz.
 Algunos a leer el titulo de este articulo y conociéndome, pensarían que iba a hablar de economía, de datos, de cifras y se han equivocado parcialmente. Estoy hablando de una economía social, de libertad económica y sobretodo, estoy hablando de un mundo nuevo y diferente.
 Yo creo, que después de siglos en los que España nunca estuvo al frente de ninguna Revolución, es el momento de hacerla. Sin guillotina, sin armas, sin exilio, solo con ideas, con ilusiones y con la voluntad decidida de no volver a caer en los errores del pasado.
 Espero y deseo que los jóvenes que no están prostituidos por los años de la expansión económica especulativa, sean los impulsores de un futuro distinto y mejor. Aprendamos de los errores del pasado, no volvamos a caer en el espejismo de la falsa abundancia, invirtamos en lo único que ninguna crisis nos podrá quitar jamás, en una nueva educación para una nueva sociedad.
 
"Sólo el hombre culto es libre".  
  

lunes, 13 de mayo de 2013

EL INCREMENTO DE LA DELINCUENCIA. NUEVA LACRA EN ALMONTE


INMIGRACION: SEPARAR EL GRANO DE LA PAJA.

 Yo sé que dentro de lo políticamente correcto no está el hablar mal de la inmigración.
 Pero como yo no pido votos ni suelo callarme lo que pienso, voy a denunciar una situación amenazante para nuestra sociedad y para los inmigrantes de bien, que solo quieren trabajar.
 En los últimos meses, están llegando en oleadas, personas expulsadas de otros países de Europa. Podemos ver por nuestras calles a personas que mas que trabajadores parecen "otra cosa".
 También en los alrededores de nuestros pueblos, en el campo, podemos ver acampadas "ilegales" con familias enteras e incluso, en algunos casos, grupos de varias decenas de personas. Y yo, como cualquiera, me pregunto: ¿de qué viven, si no trabajan?
 Estamos asistiendo al renacer de la mendicidad, como en los años de nuestra pos-guerra civil.
Estamos viendo estampas lamentables de personas buscando en la basura o esperando que los restaurantes o supermercados arrojen alimentos en mal estado o caducados. Volvemos a ver personas harapientas, pidiendo limosna por nuestras calles y plazas.
 ¿Esta era la inmigración que iba a salvar nuestras pensiones de la Seguridad Social?
 Aquí, de inmediato, nuestros progres, se lanzaron a la critica fácil contra Berlusconi y otros dirigentes Europeos, cuando anunciaron expulsiones de inmigrantes ilegales. Pero, con esas declaraciones públicas, lo único que hemos conseguido es convertirnos en el país a donde se están desplazando todos esos "expulsados", con el resultado que tenemos a la vista.
 Otro tema, que no es de ahora, sino que venimos padeciendo desde hace tiempo, es el de las mafias de países del este de Europa.  
 La cosa está clara, tenemos unas leyes permisivas con la delincuencia y un sistema judicial inoperante por la falta de medios y personal. Nuestros políticos, prefieren gastar nuestro dinero en coches oficiales escandalosamente caros, en campañas de publicidad de autobombo, en contrataciones clientelares y mientras tanto, tenemos unos juzgados tercermundistas, que son la alegría de la delincuencia en general.
 Eso sí, tenemos un Juez Garzón, que mientras deja salir de la cárcel a presos peligrosos por olvido y "falta de tiempo", se dedica a dar conferencias, previo pago, en cualquier lugar del mundo mundial. O inicia procedimientos para desenterrar a muertos de la guerra civil, supongo que para condenar a los responsables, que también llevan años muertos. La cosa seria cómica si no fuese dramática.
 Pero volviendo al problema de la inmigración ilegal. Parece que nuestro gobierno está esperando a que ocurra alguna desgracia irreparable para "tirarse de los pelos" y empezar a tomar medidas. Medidas a destiempo, como nos tiene acostumbrados.
 Ya he dicho en otros artículos que con esta situación, los primeros y más perjudicados son los inmigrantes legales. Los que, de verdad, vienen a ganarse la vida dignamente y a ayudar a sus familias en sus países de origen. Porque, cuando se producen robos o cualquier otro acto delictivo, por parte de algún extranjero, la gente, tiende a generalizar injustamente y pagan "justos por pecadores".

 Estamos viviendo una situación de crisis y de paro que afecta a todos. Tenemos un sistema de protección social, que pagamos entre todos los que trabajamos y todos, sean nacionales o inmigrantes trabajadores, tenemos los mismos derechos. Lo que no es lógico es que nuestro sistema se colapse por dar servicio a esas personas que jamás han trabajado y que nadie sabe a que se dedican, ni de que viven.

 El incremento de la delincuencia menor, de momento, está directamente relacionado con esta avalancha de "ilegales expulsados". Raro es el día que en nuestros tranquilos pueblos no se producen robos o hurtos. La gente teme dejar la puerta de su vivienda abierta, como siempre se hacía en nuestros pueblos, por miedo a que entren a robar. Ya son muchos los casos que están sucediendo. Y ocultar la realidad no es el mejor camino. Tenemos un problema, tenemos que denunciarlo y tenemos que exigir a nuestras Autoridades que nos den una solución. Yo entiendo, que no es fácil, que no todos los "ilegales" son delincuentes y que no todos los delincuentes son "ilegales", pero la situación está empeorando por momentos y no vemos que se estén adoptando medidas eficaces.

 

 Nada más lejos de mi intención que perjudicar a los miles de inmigrantes honrados que comparten sus vidas y su trabajo con nosotros.

 España siempre fue un país de emigración. Unas veces forzada por cuestiones políticas y otras por necesidades económicas, pero en todos los casos, en los países donde nos acogieron reconocieron nuestro esfuerzo intelectual y nuestro sacrificio por el progreso de esas naciones. Ojalá que todos los inmigrantes que están llegando lo hicieran de la misma forma que lo hicieron los españoles en su momento-

 

Es preciso considerar el pasado con respeto y el presente con desconfianza si se pretende asegurar el porvenir.


 

Luis Faraco Roldán

ESTE ARTICULO LO PUBLIQUE EN EL CONDADO SEMANAL EL 31-10-2008- HACE 4 AÑOS Y MEDIO. SE ME ACUSO DE ALARMISTA Y OTRAS PERLAS. DESGRACIADAMENTE, LA REALIDAD ME ESTA DANDO LA RAZON CON CRECES. Y LO PEOR PUEDE ESTAR POR LLEGAR.